Todo a la vez en todas partes

El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) ha publicado esta semana lo que el secretario de la ONU, Antonio Guterres, ha definido como “una guía de supervivencia para la humanidad”. El tono del sexto informe del IPCC sugiere que estamos ante una última oportunidad para garantizar un mundo habitable a las próximas generaciones. El Secretario General de la ONU ha insistido en que para abordar la crisis climática hay que hacerlo «todo a la vez en todas partes».

Todo es necesario, todo contribuye. Como decíamos en uno de los textos fundacionales de Biotropía, hace diez años: “Puesto que todo está relacionado, todo es necesario: la sobriedad y sensatez de vida, los hábitos de consumo, la espiritualidad, la ética, la economía, la política, los movimientos ciudadanos, la educación… Todo es necesario porque todo está relacionado. Cada uno desde lo que podemos y sabemos. Apreciando y valorando los esfuerzos de los demás. Apoyándonos unos en otros. Enseñándonos y ayudándonos. Contando incluso con aquellos que piensan (o pensamos) que están en un barco distinto. Cada uno en lo que podemos y sabemos, ampliando, con la ayuda de otros, nuestros ámbitos de comportamiento. Estamos cambiando el mundo.”

(Imagen: Porapak Apichodilok – Pexels)

Resumen de enlaces

Rafael Díaz-Salazar reflexiona sobre la guerra en Ucrania, los esfuerzos para una salida dialogada y la postura pacifista del papa Francisco, como líder espiritual: ¿Cuántos tanques tiene el papa para la paz en Ucrania? «La escalada de la guerra como solución del conflicto que la engendra es rechazada. No se sale de una guerra prolongándola. Afirma claramente que «la verdadera respuesta no son más armas, más sanciones. Me avergüenzo cuando leo que un grupo de Estados están empeñados en destinar el 2% del PIB para adquisición de armamentos como respuesta a lo que está sucediendo. ¡Una locura!». El alto el fuego y el inicio de un diálogo multilateral para la paz son imposibles si el arte de la diplomacia no es más intenso que el arte de la guerra.”

Por su parte y en un tono más personal, Koldo Aldai se conmueve ante tanto dolor como está provocando esta guerra y reflexiona: “Ucrania ya ha triunfado en los más importantes terrenos de la ética y de la opinión pública internacional. «Paz por territorios», puede ser una muy digna salida para Ucrania ante una situación tan comprometida, grave y lacerante”.

Leonardo Boff vuelve sobre Lo nuevo normal climatico es amenazador. “No es que estemos yendo al encuentro del calentamiento global y del cambio climático. Es que estamos ya dentro. Hemos pasado el punto crítico y estamos en un camino sin retorno. El planeta Tierra está siendo superexplotado por la voracidad industrialista, que beneficia a una pequeña parte de la humanidad, ha excluido de la mesa de la comensalidad a las grandes mayorías y nos ha llevado a esta situación amenazadora.”

Según apunta un estudio presentado en la Cumbre Iberoamericana recientemente celebrada en Santo Domingo, la producción de alimentos genera el 45% de las emisiones de gases de efecto invernadero en Iberoamérica: “Los sistemas alimentarios iberoamericanos dejaron de ser tradicionales —con cadenas cortas de producción y consumo— para pasar a ser modernos, con una mayor cantidad de alimentos procesados, que viajan una media de 3.000 kilómetros y que son almacenados, refrigerados y vendidos en grandes comercios”. Un ejemplo más de las repercusiones negativas que tiene la manera industrial de alimentarnos, ahora también en Iberoamérica.

No todo son noticias preocupantes. La ONU ha alcanzado un acuerdo para proteger al menos al 30% de los océanos para el año 2030. Se trata de la protección de la región conocida como ultramar, a más de 200 millas de las costas. Por algo se empieza.

Para terminar, en el artículo de Rafael Díaz-Salazar se recoge esta frase del papa Francisco: «Si el mundo fuese gobernado por mujeres, no existirían tantas guerras». En otro contexto afirma: «Las mujeres tienen una capacidad de gestión y de pensamiento totalmente diferente a la nuestra y también, yo diría, superior a la nuestra, de otra manera. Lo vemos también en el Vaticano: donde ponemos mujeres, inmediatamente la cosa cambia, sigue adelante».

La cita espiritual. “Los portadores de sueños” (comienzo). Gioconda Belli

En todas las profecías
está escrita la destrucción del mundo.
Todas las profecías cuentan
que el hombre creará su propia destrucción.

Pero los siglos y la vida
que siempre se renueva
engendraron también una generación
de amadores y soñadores;
hombres y mujeres que no soñaron
con la destrucción del mundo,
sino con la construcción del mundo
de las mariposas y los ruiseñores.

Desde pequeños venían marcados por el amor.
detrás de su apariencia cotidiana
guardaban la ternura y el sol de medianoche.
Las madres los encontraban llorando
por un pájaro muerto
y más tarde también los encontraron a muchos
muertos como pájaros.
Estos seres cohabitaron con mujeres traslúcidas
y las dejaron preñadas de miel y de hijos verdecidos
por un invierno de caricias.
Así fue como proliferaron en el mundo los portadores de sueños,
atacados ferozmente por los portadores de profecías
habladoras de catástrofes.
Los llamaron ilusos, románticos, pensadores de utopías
dijeron que sus palabras eran viejas
y, en efecto, lo eran porque la memoria del paraíso
es antigua al corazón del hombre.
Los acumuladores de riquezas les temían
lanzaban sus ejércitos contra ellos,
pero los portadores de sueños todas las noches
hacían el amor
y seguía brotando su semilla del vientre de ellas
que no sólo portaban sueños sino que los
multiplicaban y los hacían correr y hablar.
De esta forma el mundo engendró de nuevo su vida
como también había engendrado
a los que inventaron la manera
de apagar el sol.